El viejito pascuero renuncia !!

Polo Norte, 24 de Diciembre de 2007.

Queridos niños de la tierra:

Se extrañarán de recibir una carta mía, cuando lo tradicional es al revés. La escribo con una profunda tristeza, puesto que tiene como fin presentar mi renuncia indeclinable a mi cargo de "Viejo Símbolo de la Navidad".

Qué tiempos aquellos, cuando esperaba ansioso todo el año para cargar mi trineo con autitos de madera, muñecas de trapo y caballitos con ruedas. La modernidad ha arrasado en el mundo, el Polo Norte no se ha salvado de ella y desde hace años que no me llegan otras peticiones que no sean la consola de videojuegos de moda, las pantallas de plasma y los computadores de la última chupada del mate. Cómo no enternecerme con esas cartitas y dejar que un niño se quede llorando porque recibió un trompo de plástico en vez de su añorada PlayStation 3, aunque reconozco que me fui de raja cuando le vi el precio. Es una pena que haya tenido que efectuar una drástica reducción de personal entre mis fieles ayudantes, los gnomos. Su nula preparación en aspectos tecnológicos, hicieron inviable producir estos engendros electrónicos que me piden los niños con toda la inocencia del mundo. De la escuela antigua, lo único que saben hacer estos enanos son monos de palo. Ni una solicitud al SENCE sirvió para capacitarlos, por ser esta una empresa sin fines de lucro. Y ahí se me alzaron. Millonarias demandas del sindicato 1 y 2 me llegaron por despidos injustificados sin contar una que otra por discriminación laboral. Los muy patudos me han hecho quedar como un empresario chupasangre que corta a personas con enanismo, narizonismo y orejismo. Asi que la Dirección del Trabajo me tiene de las huevas. Los pocos que quedaron, hicieron causa común con su raza y se me han botado a una huelga que lleva varios meses. Ni les cuento las marchas que me han hecho en medio de la avenida Polo Norte, destrozando los pinos, los farolitos y todo lo que encontraban a su paso. Hasta a mi casa le llegó una bomba molotov tirada por estos enanos anarquistas.

Las escuelas para enanos me las tomaron, aduciendo graves falencias en la preparación de los artesanos de los juguetes, que no podían financiar el pasaje del trineo y otras payasadas por el estilo. Más y más protestas donde se infiltraban trolls que me acusaban de ser un representante del neoliberalismo polar y un símbolo del capitalismo creado por los gringos. Capitalista de adónde, si ando de rojo todo el año.

Más encima unos cabros ecologistas me empapelaron de quejas por el supuesto maltrato a los renos voladores, que están en peligro de extinción. Me acusaron de hacerlos trabajar insanamente, forzando a los únicos nueve ejemplares que quedan en el mundo a tirar un trineo gigantesto con toneladas de peso alrededor del mundo y yo cagado de la risa arriba. No hay derecho. Siguiendo con los renos, en países como Chile, el SAG me los requisa cada año por ser una especie prohibida y ahí tengo que estar hueviando varias horas para que me entreguen los papeles. Menos mal que tengo algunas conexiones con senadores de la república a los que les basta una llamada para que me dejen entrar a repartir los regalitos. Claro que nada es gratis y varias facturas falsas les he tenido que pasar a cambio. Ni un respeto. Lo malo es que por culpa de la huelga de los gnomos, se me traspapelaron y me salieron con el giro de la fábrica de juguetes y parece que ha quedado la cagada. Este año había decidido no ocupar el trineo porque hasta un TAG le tengo que poner a la cagada y para ahorrar plata me compré unos tickets en Air Madrid para mí y el único par de gnomos fieles que me quedan, mis adorables lamebotas Moreirín y Colomín. Y ahí quede con unas mierdas de pasajes que no sirven para nada.

Tuve que poner una central computacional para los pedidos por e-mail, que para lo único que sirve es para que estos enanos degenerados bajen fotos en pelotas de Sarita Vasquez y Paty Maldonado. Bueno, son gnomos, enanos y feos, tendrán otros gustos digo yo. Pero con esto de la huelga, nadie se hace cargo del correo electrónico. Me hackearon el servidor, me robaron la base de datos y se la vendieron a las empresas de telemarketing como pan caliente. Para más recacha, unos carteros ociosos me han quemado otras miles de cartas con peticiones que nunca llegarán.

Más encima a mediados de año, para financiar un poco las operaciones, puse a los enanos a producir unos quesitos que según una vieja francesa que vino a dar una charla al Polo eran la panacea de negocio. Ahí terminé de perder el resto de plata que me quedaba. Así que los que pidieron plasmas, cagaron no más.

Y aquí estoy. Tapado de deudas con las casas comerciales y los bancos para comprar las huevadas de Playstation. De vitalicio en DICOM. Y con una pensión de vejez que no alcanza ni para comprar galletas pascueras. Ni el traje me queda bueno, porque estoy en los huesos. De puro bonachón que soy no he cobrado un peso por la utilización de mi imagen comercial en todas partes. Seré huevón.

Con mi esposa, la Mery Christmas, esperamos seguir sobreviviendo en nuestra pequeña casita social que más encima se nieva por todas partes. Con dolor he visto que mi presencia en el mundo ya no es tan necesaria, puesto que todo es comprar, gastar y gastar en Navidad. Me he dado cuenta que mi obra no tiene su intención inicial. Decidí renunciar en el momento que me dí cuenta que el verdadero espíritu navideño se fue al olvido. Hace poco, los titulares de los diarios anunciaron con fanfarria "El viejito ha muerto". Ahí dije: Cagué.

Y no estoy muerto, pero a veces preferiría estarlo.

Con mucha pena, pero enviándoles un afectuoso saludo de fin de año, que es lo único que estoy en condiciones de regalar se despide

El Viejito Pascuero
alias Santa Claus, Papá Noel o San Nicolás.
Ex encargado de despacho de regalos de Navidad.
P.D.: Vendo excelente charqui de reno. Interesados escriban a:
Santa Claus
96930 Círculo Polar,
Finlandia.